La mujer en el entorno rural se encuentra en una situación de vulnerabilidad que obliga a los agentes sociales a la articulación de medidas específicas de desarrollo y participación. Al hecho de encontrarse en un enclave económicamente desprotegido se suele sumar una cultura compartida reticente al cambio y a la innovación en los roles de género. Pero el bienestar social y el desarrollo comunitario no son posibles en nuestro entorno globalizado sin contar con el bienestar individual y la importancia de su capital humano y social. El artículo reflexiona sobre estos temas y aporta posibles estrategias de intervención.
Women are frequently situated at a risky situation at the rural social environment. Social agents aware of this situation, have to design specific programs to them in order to improve her development and participation. They have to affront not only the economical decadency of their communities but the native culture resistance to social innovation and traditional gender roles change. But in our globalize world, welfare is not possible without taking into account personal wellbeing and human and social capital importance. This article deeps into these topics and suggests possible intervention strategies.