Resumen:
Antiguamente se etiquetaba a las personas que asistían a psicoterapia como “locos” o “enfermos mentales” (Acuña, 2017). Sin embargo, gracias a estudios e investigaciones científicas, la psicología ha ido fortaleciendo su presencia en los últimos años, haciéndose más popular en los distintos continentes. A pesar de ello, aún se encuentran ciertos obstáculos en el camino, pues en ocasiones la información recibida por parte de la población es escasa o está sesgada, generando una difusión de falacias que afectan la reputación del rol del psicólogo y de las personas que asisten a terapia (Berrezueta y Vaca, 2018).
Esto, sumado a la baja oferta de servicios de salud mental dado que existe una falta de apoyo presupuestal por parte del gobierno (Ministerio de Salud, 2019) a pesar del gran porcentaje poblacional que padece o ha padecido trastornos mentales en algún momento de su vida, podría significar una limitación para el desarrollo profesional y bienestar personal de la comunidad (Piazza y Fiestas, 2014).
Es en este contexto que se crea el departamento de psicología como parte del proyecto social enfocado en apoyar a las personas de bajos recursos del distrito de San Juan de Miraflores. En el cual, las labores psicológicas de atención al público son de índole individual (evaluación y consejería) y/o grupal (talleres) según la necesidad de los consultantes. De este modo, gracias a los servicios brindados en el año 2017, se obtuvo como resultado una significativa cantidad de personas satisfechas con los mismos, incrementándose la demanda de solicitudes, así como también la psicoeducación a la comunidad sobre la psicología y sus principales funciones.