Resumen:
Se han realizado muchos estudios que han demostrado, especialmente en el caso de Lima, que las aguas que se usan para regar los campos de cultivo son aguas residuales de origen industrial y doméstico, lo que representa un grave riesgo para la población. Esta situación debe llevarnos a tomar conciencia de los riesgos orginados por la indiscriminada generación de contaminantes en las industrias, lo que exige el establecimiento de programas de tratamiento de desechos industriales por parte de las personas involucradas en los proceso de fabricación.