Resumen:
Más que un análisis, un estudio,
una reflexión, un tratado o un
simple comentario, quisiera que las siguientes
líneas tomen la forma de una
oración. Una sentida plegaria cartuja
o trapense, no sé, que me permita
agradecer a todos aquellos que en
Lima, Nueva York o Buenos Aires se
dedicaron al noble oficio de ridiculizar
a los políticos.